Limitar las tarifas de cuidado infantil significa establecer un límite máximo en cuánto pueden cobrar los proveedores de cuidado infantil, con el objetivo de hacer que el cuidado infantil sea más asequible para las familias y aumentar el acceso a la educación infantil temprana. Los defensores argumentan que ayuda a las familias trabajadoras a gestionar los costos, apoya el desarrollo infantil y reduce las barreras financieras para acceder al cuidado infantil. Los opositores argumentan que puede llevar a una reducción en la calidad del cuidado, desalentar la inversión en servicios de cuidado infantil y poner una carga financiera en los proveedores.
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